Primera Eucaristía celebrada en el Altar Mayor, nuevo templo de San Rafael de Gramalote
Este miércoles 27 de noviembre, en el marco del aniversario 167° del municipio de Gramalote, se organizó la primera Eucaristía en el Altar Mayor del nuevo templo de Gramalote: San Rafael, tras 14 años de aquella remoción de masa que destruyó el municipio, dejando de existir, incluido el templo.
La fe, el esfuerzo en comunidad, y la perseverancia de los sacerdotes al mantener la fe viva de sus fieles tras estos 14 años, les reunió este día para vivir esta primera Eucaristía. Fruto de ello, ahora en el nuevo casco urbano de Gramalote, se está construyendo el templo, que, con la ayuda de los gramaloteros, es una obra que avanza, y en la que ya se encuentra lista la cúpula central, encima del altar, y las capillas laterales.
Esta jornada comenzó desde las 8:00 a.m. con el recibimiento a monseñor José Libardo, Obispo de la Diócesis de la Cúcuta, acompañado por el Arzobispo emérito de Villavicencio, monseñor Oscar Urbina Ortega, los presbíteros, Samuel García Botello, párroco de San Rafael de Gramalote; Héctor Gabriel García Torres, vicario parroquial, William Aguilar Vargas, vicario general y demás sacerdotes de esta Iglesia Particular. Además, de contar con la presencia de los futuros confirmandos, la comitiva del señor alcalde, autoridades civiles y militares, y la grata presencia de nuestra Madre María, en la réplica de la imagen de Nuestra Señora del Rosario de Monguí que fue entronizada al inicio de la Eucaristía.
Allí, se dirigieron hasta el parque principal donde realizaron un acto protocolario en celebración al 167° aniversario del municipio. Seguido, monseñor José Libardo dio su bendición a cada una de las veredas, y a los barrios que conforman el municipio. Terminado este acto de bendición, se dirigieron al templo en construcción donde se dio inicio a la Eucaristía.
En la Eucaristía celebrada por Monseñor José Libardo y demás sacerdotes de esta Iglesia diocesana, en su homilía, resaltó que: “La Santísima Virgen María es nuestra Madre… Modelo de vida cristiana”, ya que en ella “tenemos toda la disponibilidad para obrar la voluntad de Dios”. Además, mencionó que cada bautizado es un creyente en Cristo, y por ello se experimenta la Cruz (dificultades y tormentas), pero: “es allí donde reconocemos a Jesús como Señor de nuestra vida y nuestra historia”, y eso solo se logra en compañía de la Santísima Virgen María y san José.
A los fieles gramaloteros presentes en la Eucaristía, monseñor se dirigió diciéndoles que, tras 14 años de aquella tragedia de aquel 2010, y después de inmensidad de adversidades: “la fe en comunidad es la que los impulsó a seguir caminando, porque en Dios encontramos sentido”, porque “Él es la barca en medio de la tormenta quien nos tiene aquí hoy”.
A los confirmandos también les expresó la importancia del Espíritu Santo y cómo, si se piden sus dones, Él vendrá a fortalecer a todos los hijos de Dios y a dar la vida en el Espíritu en la que deben perseverar.
A la comunidad parroquial finalmente les resaltó que: “el templo se va construyendo con el párroco y la comunidad como un homenaje a Dios, el lugar de su presencia”, a pesar de que la tragedia les hubiese quitado el templo “no se quedó sin párroco y sin comunidad, y debido a eso es que todos estamos aquí, comprometidos en la construcción del templo”.
“Lo que le da identidad y grandeza a un pueblo, es su templo”, y por ello es un lugar que tiene “la certeza de la cercanía de Dios”. Y con el Altar Mayor, altar donde se realiza el sacrificio del Cordero, estará el crucificado, aquel que siempre debe estar fija la mirada desde la contemplación, donde se fortalecerá la vida de todos los fieles.
Este templo será posible con la ayuda de todas las personas de buena voluntad que quieran contribuir a la construcción de esta casa de Dios. Quienes desean pueden donar a la cuenta Bancolombia: 8001679751514, junto al NIT de la Parroquia San Rafael de Gramalote: 890500693.
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