Tras décadas de manipular la información, Zuckerberg decide imitar a Elon Musk con ‘X’, consciente de las sanciones que podrían venir. Su trayectoria incluye la difusión de noticias falsas y el apoyo a la agenda progresista y de izquierda a nivel global.
En una decisión que podría alterar el panorama de las redes sociales, Mark Zuckerberg ha anunciado la eliminación de los «verificadores de hechos» en Facebook e Instagram, reemplazándolos por “Notas de la comunidad”. Este modelo, inspirado en la red social X (antes Twitter), permitirá a los usuarios añadir contexto a las publicaciones. Según Mark Zuckerberg, esta medida busca restaurar la «libertad de expresión» en sus plataformas.
Sin embargo, este anuncio llega tras años en los que Meta, especialmente Facebook, ha sido señalada como una herramienta clave para propagar narrativas de izquierda y promover una agenda progresista radical. Durante este tiempo, la plataforma se convirtió en un arma para moldear opiniones públicas a través de noticias sesgadas y, en muchos casos, falsas.
Facebook y su Papel en la Propaganda Progresista
Bajo el pretexto de luchar contra la desinformación, los verificadores de hechos de Meta se han encargado de censurar contenidos que cuestionaban el discurso dominante. Esta práctica no solo limitó la libertad de expresión, sino que consolidó un espacio en el que ideologías de izquierda encontraron terreno fértil para florecer.
Facebook ha sido el medio perfecto para ensalzar gobiernos autoritarios disfrazados de progresismo, promoviendo políticas que buscan adoctrinar a los ciudadanos. Estas narrativas, apoyadas por noticias convenientemente filtradas y manipuladas, han erosionado valores tradicionales y creado una sociedad polarizada, desconfiada y sometida a un control ideológico.
El director de asuntos globales de Meta, Joel Kaplan, reconoció que los verificadores de hechos, aunque bien intencionados, estaban impregnados de sesgos políticos. Esto demuestra que Facebook no era un simple espectador en la lucha por el control del discurso público, sino un actor central en la difusión de propaganda.
¿Un Paso Hacia la Libertad o Más Caos Informativo?
El cambio hacia las “Notas de la comunidad” puede parecer un avance hacia la democratización de la información, pero plantea riesgos considerables. Sin un control centralizado, la plataforma podría convertirse en un campo de batalla para desinformación masiva y teorías conspirativas.
La eliminación de los verificadores de hechos es un golpe simbólico a años de censura ideológica, pero la historia de Facebook nos recuerda que, bajo la apariencia de libertad, puede esconderse un nuevo mecanismo para influir negativamente en la sociedad.
