Colmundo Radio, bajo fachada cristiana, propaga odio y desinformación desde su noticiero, sirviendo como altavoz político de la ultraderecha en Colombia
Por: Stella Ramirez G.
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.
Colmundo Radio: Emisoras cuya propiedad figura a nombre de la Cruzada Estudiantil y profesional de Colombia, pero que, en la realidad, el propietario es el líder cristiano de ultraderecha Jimmy Chamorro y su familia, son emisoras que desde su «noticiero» ASB Noticias, se han vuelto altavoces del odio.
Cuando los micrófonos se convierten en armas, el periodismo se vuelve cómplice. ASB Noticias de Colmundo Radio ha dejado de informar para convertirse en atizador de la violencia verbal de la ultraderecha.
Desde sus cabinas se estigmatiza al gobierno popular, se incita al miedo y se legitima el odio como opinión. No es periodismo. Es propaganda disfrazada. No es crítica. Es sabotaje político con licencia radial. ¿Hasta cuándo vamos a normalizar medios que siembran terror para cosechar poder?
Desde hace meses, Colmundo Radio, que funge bajo el manto de emisoras «cristianas» para evadir impuestos, desde su «noticiero» ha sido pieza clave en la campaña de desprestigio contra el actual Gobierno.
Editoriales disfrazadas de opinión, entrevistas dirigidas y un menú constante de odio clasista. No informan: adoctrinan.
La violencia verbal que se escucha en esa emisora no es inocente. En Colombia, señalar es poner en riesgo. Y cuando se normaliza el odio desde los medios, se habilita la violencia real. ¿Ejemplos? Basta con oír los programas en franjas de la mañana. Invitados como Rafael Nieto, María Andrea Nieto, Fernando Londoño, el exfiscal Barbosa repiten sin filtro las narrativas del miedo. Todo es “comunismo”, “dictadura”, “peligro inminente”.
¿Quién controla al que desinforma? Mientras se escudan en la libertad de prensa, estos medios juegan a ser poder sin responsabilidad. Y la democracia se resiente. El periodismo puede ser crítico o puede ser cómplice.
Colmundo Radio eligió el lado de quienes quieren incendiar al país para luego posar de bomberos. El problema no es solo lo que dicen: es lo que provocan. En resumen: Los propietarios de la cadena radial Colmundo Radio son Predicadores de una fe que no practican.
¿Acaso no predican que Dios es quien quita y pone reyes? ¿Acaso la palabra de Dios no dice: «Da al César lo que es del César»?
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