El cierre del Estrecho de Ormuz por donde pasan los grandes exportadores de petróleo del mundo árabe es el as que tiene bajo la manga el líder supremo Alí Jameini
Los ataques de Estados Unidos contra instalaciones nucleares iraníes están agudizando el foco en una opción que Irán todavía no ha desplegado: cerrar el Estrecho de Ormuz e interrumpir el comercio petrolero del mundo. El Parlamento iraní ya pidió el cierre, pero aún debe recibir la aprobación del Consejo Nacional de Seguridad de la República Islámica, el encargado de asesorar al líder supremo, Alí Jameini, el único capaz de declarar la guerra.
Ese estrecho controlado por Irán y Omán desde un acuerdo en 1975, tiene unos 55 kilómetros de ancho, es puerta de entrada entre los países del Golfo Pérsico y el resto del mundo, y es esencial para el transporte de petróleo y gas natural licuado. Por allí pasan los grandes exportadores de petróleo de la región: Emiratos, Qatar, Baréin, Arabia Saudita, Kuwait, Irak, Irán y Omán. Solo dos de ellos, Arabia Saudita y Emiratos tienen escapatoria de Ormuz porque poseen una red de oleoductos que les permite sortear el estrecho.
En 2022, unos 21 millones de barriles de crudo circularon por él a diario, según la Administración de Información Energética estadounidense (EIA). Esto representaba alrededor del 20 % del consumo mundial de petróleo crudo. Una pequeña interrupción en el tráfico de esta ruta haría disparar el precio del petróleo en un 70 %, dice J.P. Morgan. Los beneficiados en el corto pazo serán los productores fuera de la zona, como Colombia. Pero cualquier observador puede detectar los perverso efectos sobre la inflación y el crecimiento económico del mundo.
En el gas licuado, del que Colombia es ahora importador, el mercado también se ve afectado por el conflicto dado que por el estrecho pasa el 20 % de las exportaciones mundiales de gas natural licuado (GNL), según señala Rystad Energy. Por su parte, Bloomberg dice que Qatar ha pedido a los buques metaneros que esperen fuera del Estrecho hasta que estén listos para cargar.
China entra en escena
Si Irán toma finalmente esa decisión, no es difícil suponer que perdería ingresos y, lo que es más importante, sería un golpe a su relación comercial con China que es su principal cliente. A tal puno que hoy exporta el 95 % de su petróleo a China.
El estrecho nunca ha sido bloqueado, pero muchas veces ha sido blanco de amenazas, Ya en 2006, Alí Jamenei estableció una doctrina según la cual un bloqueo del Estrecho sólo podría desencadenarse en una situación en la que Irán no estuviera “iniciando la guerra”, sino respondiendo a una agresión de Estados Unidos o de uno de sus aliados.
En 2011, Irán amenazó con no dejar pasar “ni una sola gota de petróleo por el Estrecho de Ormuz” en caso de sanciones internacionales contra su programa de enriquecimiento de uranio. En 2019, el Estrecho se convirtió también en el escenario de un enfrentamiento a distancia entre Estados Unidos e Irán.
Esta vez la decisión pende de un hilo y sobre ella todavía pesa la relación con China y las represalias Israel y Estados Unidos a los aliados
En caso de optar por el cierre, hay varias opciones que Jamenei puede utilizar. En el manual está intensificar el acoso a la navegación comercial a través de Ormuz. En el pasado, Irán ha ordenado el ingreso de buques a sus aguas territoriales e incluso ha retenido embarcaciones, una perspectiva que aterroriza a las tripulaciones.
Los Guardianes de la Revolución, ejército ideológico de Irán, controlan las operaciones navales en el golfo y se encargan de garantizar la seguridad del estrecho. Una de las mayores interrupciones del transporte de petróleo se remonta a 1984, en pleno conflicto Irán-Irak (1980-1988), durante la “guerra de los petroleros”. Más de 500 buques fueron destruidos o dañados en ese período.
Las minas marinas tendrían el potencial de tener un impacto significativo en el suministro al disuadir el tráfico a través del estrecho, aunque el riesgo resultante para los propios barcos iraníes puede hacer que la medida sea menos probable.
El escenario extremo para Ormuz es un cierre total y prolongado. A pesar de haber amenazado con cortar el tránsito en repetidas ocasiones, Irán nunca cumplió con su amenaza, como en la fábula del pastorillo y el lobo, que es lo que esperan los optimistas. Lo otro más realista es la evidencia de si tiene suficiente capacidad militar para hacerlo. Poque el bloqueo del Estrecho de Ormuz es, hasta cierto punto, el arma nuclear de Irán.
Además: El líder supremo de Irán que definirá que pasará tras el ataque de EE.UU. a 3 de sus centros nucleares
-.
Anuncios.
Anuncios.
(function(d, s, id) {
var js, fjs = d.getElementsByTagName(s)[0];
if (d.getElementById(id)) return;
js = d.createElement(s); js.id = id;
js.src = «//connect.facebook.net/en_GB/all.js#xfbml=1»;
fjs.parentNode.insertBefore(js, fjs);
}(document, ‘script’, ‘facebook-jssdk’));
!function(f,b,e,v,n,t,s)
{if(f.fbq)return;n=f.fbq=function(){n.callMethod?
n.callMethod.apply(n,arguments):n.queue.push(arguments)};
if(!f._fbq)f._fbq=n;n.push=n;n.loaded=!0;n.version=’2.0′;
n.queue=[];t=b.createElement(e);t.async=!0;
t.src=v;s=b.getElementsByTagName(e)[0];
s.parentNode.insertBefore(t,s)}(window, document,’script’,
‘https://connect.facebook.net/en_US/fbevents.js’);
fbq(‘init’, ‘446647882874276’);
fbq(‘track’, ‘PageView’);