La llegada de más de 6.000 desplazados provenientes del Catatumbo a Cúcuta ha puesto de manifiesto la magnitud de la crisis humanitaria que enfrenta la región. Lo que inicialmente parecía un flujo controlado de 500 personas ha desbordado cualquier expectativa, dejando en claro que esta situación requiere la colaboración activa del pueblo cucuteño y de las autoridades locales.
Enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las FARC en el Catatumbo han forzado a miles de familias a abandonar sus hogares, cargando con poco más que la esperanza de encontrar refugio y ayuda. Este éxodo masivo ha llevado a la Alcaldía de Cúcuta, encabezada por el alcalde Jorge Acevedo, a activar la campaña “Unidos por el Catatumbo”, en la que cada ciudadano puede marcar la diferencia.
La importancia de la unión entre comunidad y autoridades
En momentos de crisis, la unión entre las autoridades locales y la ciudadanía es esencial. La respuesta conjunta asegura que se puedan atender las necesidades básicas de los desplazados, desde el suministro de alimentos hasta la provisión de albergue temporal. Gracias al apoyo de entidades como la Cruz Roja y a la generosidad de los cucuteños, se están entregando ayudas humanitarias que incluyen alimentos, colchonetas, artículos de aseo y ropa.
Sin embargo, este desafío no puede recaer únicamente en el gobierno municipal o en organizaciones humanitarias. La comunidad tiene un papel vital, no solo donando recursos, sino también extendiendo un mensaje de solidaridad que trascienda fronteras.
¿Por qué debemos apoyar a los desplazados?
Los desplazados del Catatumbo no solo cargan con la pérdida de sus hogares, sino también con el trauma de la violencia. Como sociedad, tenemos el deber moral de ayudarlos a reconstruir sus vidas. Cada aporte, por pequeño que parezca, representa un gesto de esperanza para quienes enfrentan esta adversidad.
Hoy, más que nunca, el pueblo cucuteño tiene la oportunidad de demostrar su grandeza y compromiso. La unión no solo aliviará esta crisis inmediata, sino que fortalecerá los lazos de una comunidad solidaria y resiliente. ¡Unidos por el Catatumbo, unidos por un futuro mejor!
