Una tragedia se vivió la noche del pasado miércoles, en el barrio San Vicente, municipio de Curumaní, Cesar, donde un hombre, de 34 años de edad, fue localizado sin vida dentro de una de las habitaciones de su residencia, tras propinarse un disparo en la cabeza.
La víctima fue identificada como Harry Neira, cuyo cuerpo quedó sobre la cama y el arma de fuego a un lado. Al parecer, el hombre aprovechó un momento en el que estaba solo para tomar la fatal determinación.
El cadáver fue localizado por algunos familiares, quienes en medio de dolor, dieron parte a las autoridades para los actos urgentes respectivos.
La inspección técnica del cadáver fue realizada por personal del CTI, quienes además iniciaron las investigaciones correspondientes que permitan esclarecer las circunstancias que rodearon este trágico hecho.
El caso ha causado consternación entre vecinos y allegados, quienes expresaron no haber notado ninguna conducta extraña a Harry Neira, quien era una persona muy colaboradora.
Sin embargo, se conoció que presuntamente la víctima venía presentando un cuadro depresivo y durante los últimos días se mostró callado y triste. Sus familiares desconocen si tenía algún problema económico o sentimental.
Este nuevo caso, evidencia la necesidad de crear política pública para la atención a la salud mental en el departamento del Cesar, donde la población joven está siendo las más afectada al no conseguir ayuda.
En el Cesar, a través de la Secretaría de Salud Departamental, funciona la estrategia ´Guardianes de Vida´, una red de apoyo intersectorial y apoyo psicosocial para la prevención de riesgo de la conducta suicida. Con el objetivo de empoderar a la comunidad frente al cuidado de la salud mental, la identificación de riesgos, el conocimiento de los derechos en salud mental y en la activación efectiva de las rutas de atención de los problemas y trastornos mentales en los diferentes entornos sociales.
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