El alcalde Galán a través de la Empresa de Renovación y Desarrollo Urbano contrató las obras de dos antiguos edificios del San Juan de Dios
El Presidente Petro insistió con vehemencia en el último Consejo de ministros que el alcalde de Bogotá Carlos Fernando Galán estaba dejando derrumbar el emblemático hospital San Juan de Dios y no estaban haciendo mayor cosa. Los hechos parecen contradecir sus afirmaciones porque hay al menos dos obras marchando. A través de la Empresa de Renovación y Desarrollo Urbano ( Renobo), el gerente Carlos Felipe Reyes, adjudicó el contrato para intervenir el complejo Hospitalario San Juan de Dios. Las reformas deberían acabar durante el segundo semestre del 2026.
El consorcio seleccionado para el edificio Enfermedades Tropicales fue el Consorcio Prohacer 25, que tiene de representante legal a Juan Alejandro Carlos Alberto Rivera Pinilla. El presupuesto asignado a Prohacer fue de $12.928 millones.
Prohacer 25 fue conformado por dos empresas, Promaco Ingenieria S.A.S. y Hacer de Colombia S.A.S. El representante legal y gerente de Promaco es Juan Alejandro Carlos Alberto Rivera Pinilla, de otra parte, Hacer de Colombia tiene de gerente y representante legal a Oscar Tamayo Peralta.
El edifico Enfermedades Tropicales fue construido entre 1933 y 1935 por Pablo de la Cruz. El lugar fue importante por realizar investigaciones de enfermedades como dengue, malaria y leptospirosis, males del trópico. Fue un punto valioso dentro de la historia de la salud pública en el país por los estudios clínicos realizados.
Dentro de la misma licitación el distrito escogió a Consorcio SJD 2025, representante legal José García Pérez, para las reformas del edificio Santiago Samper. SJD debe manejar una chequera de 12.031 millones de pesos.
SJD 2025 es la unión de GMA Construcciones S.A.S. y AG3 Ingeniería S.A.S. El representante legal de GMA es José García Pérez y AG3 Ingeniería S.A.S tiene de representante es Aurelio Gutiérrez Castillo.
Si se mira la historia del edificio Santiago Samper se encuentran los diseños del arquitecto Pablo de la Cruz. Las obras de construcción fueron de 1992 a 1926. El Santiago Samper fue pionero en el país al especializarse en oncología. A lo largo de su historia albergó laboratorios de bacteriología, química, hematología y anatomía patológica, así como un auditorio, museo médico y salas de consulta.
En resumen, se espera gastar para los edificios Santiago Samper y Enfermedades Tropicales 24.900 millones de pesos. La intervención es parte del plan de revitalización del complejo hospitalario San Juan de Dios alrededor del cual hay un costosísimo pleito con la empresa española Copasa, que había sido contratada por la alcaldesa Claudia López para demoler la torre central del complejo.
Todo estaba todo listo para iniciar los trabajos, pero el proceso se interrumpió por no contar con la autorización del Ministerio de Cultura, que debía dar el visto bueno por tratarse de un bien patrimonial. Este hecho frenó la obra, en efecto los españoles demandaron y la obligación ahora es ir reparando el antiguo hospital que ya tiene en servicio un jardín infantil, oficinas del Centro Dermatológico entre otros.
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