La Manuelita de la familia Eder donde se casó el hijo de Santos y la hacienda Fagua de los Cavelier dueños de la Alquería están intactas y las alquilan
La hacienda La Manuelita, con más de 200 años de historia, fue originalmente propiedad de Jorge Enrique Isaacs, padre del poeta Jorge Isaacs, autor de la novela María. El nombre Manuelita rinde homenaje a Manuela Ferrer Scarpetta, esposa del poeta. En 1864, Santiago Eder adquirió la propiedad, dando inicio a la historia del ingenio azucarero Manuelita que heredó la familia Eder y de las haciendas históricas en Colombia.
La historia de Manuelita, una de las empresas más emblemáticas del Valle del Cauca, se remonta a ese año cuando Eder adquirió La Manuelita y también La Rita en Palmira. Al principio operaba un pequeño trapiche movido por tracción animal que producía 4 quintales diarios de azúcar. Con el tiempo, la empresa adoptó nuevas tecnologías, como la energía hidráulica y el molino Louisiana No. 1, con lo que aumentó en grande su capacidad de producción. En 1901, Manuelita se convirtió en el primer ingenio de Colombia en producir azúcar en una fábrica a vapor, capaz de moler 50 toneladas de caña por día.
La que se convertiría en una de las haciendas históricas de Colombia
Bajo el liderazgo de Harold Eder en 1953, se construyó la primera fábrica en Colombia dedicada exclusivamente a la producción de azúcar refinada, con una capacidad de molienda de 1.400 toneladas diarias. Para 1966, ya molía 2.600. Veinte años después Manuelita diversificó su portafolio con Aceites Manuelita, enfocándose en el cultivo y procesamiento de aceite de palma.
Hoy, Manuelita cuenta con 7.500 colaboradores y operaciones directas en Colombia, Perú y Chile. Exporta sus productos a 58 países y se ha propuesto reducir sus emisiones de CO₂ en un 70 % para 2030 y alcanzar el carbono neutro en 2040. La empresa también integra a más de 1.200 pequeños proveedores agrícolas en su cadena productiva y ha beneficiado a más de 21.000 personas y 2.600 familias a través de programas de educación, salud y vivienda.
La Manuelita, el escenario perfecto para las grandes bodas
Esta grande y lujosa hacienda ya no es una fábrica sino un exclusivo sitio de eventos preferido por grandes personajes y celebridades. No hace mucho fue el escenario elegido por Gabriela Tafur y Esteban Santos para celebrar su boda el 7 de septiembre de 2024. Esa fue considerada la “boda del año” en Colombia, reunió a 528 invitados, incluyendo figuras destacadas de la política y el entretenimiento nacional.
Para la ceremonia se construyó una estructura temporal de 1.200 metros cuadrados que se integró armoniosamente con la arquitectura colonial de la hacienda. El montaje incluyó luces y sonido de última generación, y contó con presentaciones musicales de Greeicy Rendón y Herencia de Timbiquí. Las madres de los novios, María Clemencia Rodríguez de Santos y Olga Liliana Náder, estuvieron al frente de la organización.
La Hacienda La Manuelita, rodeada de cañaduzales y samanes gigantescos, conserva su arquitectura tradicional y es un símbolo de la historia y la cultura del Valle del Cauca. Además de ser un monumento histórico, la casa museo recibe visitantes interesados en conocer los escenarios de la novela María. La hacienda está al pie de los cerros de la Cordillera Central, con una preciosa vista a la planicie verde, adornada por extensas plantaciones de caña de azúcar y samanes gigantescos.
La hacienda sabanera de los Cavelier, dueños de Alquería
En la sabana de Bogotá empieza en 1959 la historia de Alquería. En aquel entonces la leche se consumía cruda, lo que despertó una gran preocupación en el médico y profesor Jorge Enrique Cavelier. Para él era muy claro que debía pasteurizarla y fue entonces cuando decidió, junto a su hijo Enrique Cavelier, fundar Alquería. Aunque ahora debían darle solución a otro problema: la maquinaria con la que trabajarían. Para fortuna de ellos, en Rionegro, una pasteurizadora quebró y se encontraba a la venta. Decidieron comprar todos los aparatos para poder empezar con su gran idea de negocios.
Lo adquirido terminó en la Hacienda Fagua, en Cajicá. Allí montaron su punto de pasteurizado y Enrique Cavelier fue quien se metió de lleno con el negocio. De hecho, decidió ir a vivir junto a su familia a Cajicá, seguramente para estar al pendiente de todo lo que estaba ocurriendo. En un inicio, su producto llegaba únicamente a algunos municipios aledaños a Cajicá, como Zipaquirá y otros más. Claro que con el paso del tiempo, pasaron a distribuir sus botellas de leche a Bogotá. En 1962, Alquería dio un gran paso al pasar del vidrio al cartón parafinado para poder distribuir la leche.
Actualmente, Alquería tiene 7 plantas de producción, 10 centros de distribución y 14 centros de recolección de leche. Mientras tanto, la Hacienda Fagua es espacio de grandes eventos y restaurante. Con una refinada y sobria arquitectura propia de la región, con muros de adobe y tejas de barro. En la bella hacienda sabanera se casaron Pablo, nieto de Enrique Cavelier Gaviria, con la venezolana Isabel Gabaldón. Además de matrimonios, en el marco de la hacienda está un restaurante de nombre ‘Fagua en casa’.
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