Se trata de un acuerdo entre la gigante de remesas y la poderosa red de pagos con tarjeta para que los usuarios de remesas puedan hacer pagos digitales
En los barrios donde los bancos eran un lujo ajeno y las tarjetas un misterio plástico, la gente aprendió a hacer fila. Aprendieron a esperar. A confiar su plata al papel. A llevar billetes doblados en la media o en la caja de cigarrillos vacía. Fue allí, en esas esquinas donde el sistema parecía olvidarse de todos, donde Efecty se volvió verbo.
Lea también: dale!, la billetera de Sarmiento Angulo, se fortalece con emprendedores chilenos
Durante años, ese nombre amarillo se convirtió en sinónimo de vueltas, de giros, de la remesa que cruzaba medio país para llegar a la mamá. Efecty: una caseta, una pantalla, una señora con chaleco que entregaba dinero a cambio de números. Nada más físico, nada más humano. Hasta ahora.
Algo empezó a cambiar. Sin bombos, sin promesas ruidosas, con esa extraña mezcla de tradición y novedad, Efecty presentó una tarjeta. Pero no una de esas de plástico que se pierden en la cartera. Esta vive en el celular. Es virtual, es digital, es Visa. Y aunque suene extraño, aunque parezca un salto imposible desde el billete hasta el código QR, eso fue lo que hicieron: saltaron.
La tarjeta nació de una alianza con Visa y el Banco Coopcentral. Un esfuerzo por llevar lo intangible a los que solo conocían el billete. Una puerta —pequeña, silenciosa— que se abre hacia la digitalización de quienes nunca habían tenido acceso a una cuenta. O ni siquiera lo habían imaginado.
En Colombia, más del 95% de los municipios conocen a Efecty. Está allí, donde no hay cajeros automáticos. Donde los bancos cierran a las tres, si es que abren. Donde el efectivo todavía manda. Pero incluso allí, la economía empieza a cambiar de forma. Y la inclusión financiera —ese término que suena a discurso— toma la forma de una app que descarga cualquiera con un celular básico. Y de una tarjeta que no se ve, pero funciona.
No se trata solo de pagos. Se trata de control. De saber cuánto se gasta, de elegir dónde y cuándo comprar. De promociones, sí, pero también de dignidad. De no depender de nadie más para hacer una compra en línea, de poder pagar una suscripción, de reservar un pasaje sin pedirle la tarjeta a un conocido.
Vanessa Rodríguez Guerrero, la mujer que dirige Efecty, lo dijo como quien sabe que esto va más allá de un lanzamiento: “No es solo una tarjeta. Es una herramienta que ayuda a cumplir sueños”. Puede sonar a cliché, pero para quien nunca ha tenido una cuenta, para quien ha vivido del efectivo, lo es.
Y al otro lado, desde las oficinas de Visa, Adriana Cárdenas traduce el entusiasmo corporativo en algo más real: llegar a territorios olvidados, donde antes no había nada más que filas largas y calor. Donde ahora, con un clic, alguien puede pagar sin contacto y sin efectivo. Puede pagar, simplemente.
La tarjeta ya está disponible. Basta con descargar la app de Efecty y seguir las instrucciones. Pero lo importante no es el proceso, sino lo que representa. No es una innovación más. Es un cambio de paisaje. Una grieta en el muro de lo que se daba por hecho: que algunos estaban condenados a vivir fuera del sistema financiero. Con un celular en la mano y una tarjeta que no se toca, empieza otra historia. Y aunque nadie lo diga en voz alta, en ese salto de la fila al clic, hay algo de revolución.
-.
(function(d, s, id) {
var js, fjs = d.getElementsByTagName(s)[0];
if (d.getElementById(id)) return;
js = d.createElement(s); js.id = id;
js.src = «//connect.facebook.net/en_GB/all.js#xfbml=1»;
fjs.parentNode.insertBefore(js, fjs);
}(document, ‘script’, ‘facebook-jssdk’));
!function(f,b,e,v,n,t,s)
{if(f.fbq)return;n=f.fbq=function(){n.callMethod?
n.callMethod.apply(n,arguments):n.queue.push(arguments)};
if(!f._fbq)f._fbq=n;n.push=n;n.loaded=!0;n.version=’2.0′;
n.queue=[];t=b.createElement(e);t.async=!0;
t.src=v;s=b.getElementsByTagName(e)[0];
s.parentNode.insertBefore(t,s)}(window, document,’script’,
‘https://connect.facebook.net/en_US/fbevents.js’);
fbq(‘init’, ‘446647882874276’);
fbq(‘track’, ‘PageView’);